¿Estabas pensando comprar el nuevo Galaxy Ring? Si te gusta monitorizar tu salud y los relojes no son tu mejor aliado, es probable que el anillo inteligente de Samsung sea una buena opción. En Hipertextual hemos hablado largo y tendido sobre él, incluso lo hemos probado, pero hasta ahora no conocíamos uno de sus problemas más importantes. De hecho, ha tenido que pasar por la mesa de iFixit para que su mayor desventaja salga a la luz.
Samsung ha hecho un gran dispositivo, que es atractivo, pequeño e integra una cantidad de tecnología asombrosa, pero la naturaleza del anillo y su reducido tamaño también motivan su mayor problema. Y no hablamos de los 449 euros que tendrás que pagar si lo quieres, sino de su grado de reparabilidad.
iFixit ha confirmado que es cero. Así es, el anillo inteligente de Samsung no se puede reparar. Si se daña, ni siquiera va a servir como pisapapeles, pues su peso es de solo 2,3 gramos. Es más, tampoco se puede cambiar la batería, lo que fija la vida útil del producto en una complicada franja.
"Es imposible reparar un anillo inteligente"
El análisis de iFixit sobre el anillo inteligente de Samsung no es demasiado largo. Se resume en hablar sobre su diseño, radiografiarlo para ver qué tiene en el interior y destrozarlo. No abrirlo, sino destrozar su capa de resina epoxi para poder sacar los circuitos internos.
Es justo ahí donde reside el problema del Galaxy Ring —y de casi todos los anillos inteligentes—. Sencilla y llanamente, no se pueden reparar. Tampoco es posible sustituir su batería. Es decir, que debes cuidarlo bien, pues si hay algún problema con él o se daña por un golpe, deberás comprar otro. Y, como ya te hemos comentado, no es nada barato: cuesta 449 euros.
iFixit, de hecho, ha necesitado fundir la resina del interior y andar con mucho cuidado para poder sacar los componentes internos que, como puedes imaginar, quedan completamente inservibles. No es posible volver a montar nada ni reutilizar ninguna de las piezas. Es más, no es que el anillo inteligente de Samsung no sea reparable por un usuario medio o un experto, es que ni la propia compañía puede repararlo.
Y, aunque esto pueda parecer una estrategia para limitar las reparaciones de terceros, la realidad es que no. Fabricar un anillo inteligente pequeño y ligero, por el momento, está ligado a este tipo de ensamblajes imposibles de reparar. O lo tiras o lo destrozas.
Aunque lo cuides bien, tiene fecha de caducidad
¿Y si tengo sumo cuidado? Pues bien, si consigues mantener el Galaxy Ring en perfectas condiciones, sin un solo rasguño y nunca se te cae, probablemente no necesites repararlo nunca. Ahora bien, tarde o temprano, su batería se irá degradando y la autonomía mermará.
Actualmente, el anillo inteligente de Samsung ofrece, según la propia marca, una autonomía de unos 7 días. Como cualquier dispositivo con batería, esta se degrada y pierde efectividad, por lo que poco a poco, esa semana de duración se irá convirtiendo en unos pocos días.
Además, este detalle de la degradación afecta más a las baterías pequeñas, y puedes imaginarte cómo de minúscula es la que integra este Galaxy Ring. Cuando la autonomía llegue a un punto crítico, el reloj dejará de tener utilidad. Se quedará inservible.
Y, aunque el anillo inteligente de Samsung es nuevo y todavía queda mucho para que esto pase, algunos usuarios de otros modelos como el Oura Ring ya han experimentado este caso concreto.
La batería de mi anillo Oura no dura toda la noche
Desde el 27 de diciembre, mi anillo no ha podido rastrear mi sueño. La vida de la batería apenas dura todo el día. Me despierto y cargo mi anillo completamente muerto, antes de continuar con el día. Para el final del día, estaría al 10-15%. Luego cargaría mi anillo nuevamente antes de dormir y me despertaría sin datos de sueño y con el anillo muerto. A principios de este mes, al menos me dejaba saber cuándo me dormía, pero no daba una puntuación de sueño/preparación. Pero en los últimos 4 días, ni siquiera ha hecho eso.
He escuchado que otros tienen problemas con la batería, como que su anillo no dura 3 días desde que salió el seguimiento de oxígeno. Pero mi anillo nunca duró más de 2 días desde que lo obtuve. Pero pensé que eso era normal y no le di importancia. He tenido mi anillo por más de un año, así que estoy bastante seguro de que ya pasé el tiempo de garantía. ¿Alguien más ha tenido este problema? (Traducción de la imagen superior)
Así que ya lo sabes, el Samsung Galaxy Ring es una pieza de ingeniería bastante asombrosa, rebosa tecnología, es un producto bastante exclusivo y una buena alternativa a los relojes, pero su precio y la imposibilidad de repararlo podrían pasarle factura a su popularidad.