Por culpa de TikTok (algunos dirían que la culpa la tiene Vine), los videos cortos se han convertido en el formato preferido por la mayoría del mundo. Son divertidos, puedes ver muchísimos en una sentada y exigen un nivel mínimo de compromiso. Perder el tiempo viendo TikTok te hace sentir menos culpable que hacerlo viendo una película o una serie. Por eso fue que se convirtió en la aplicación más descargada de 2022, aunque su influencia en el mercado es mucho más profunda. Todos vimos cómo Instagram, YouTube y Snapchat integraron el formato a sus plataformas para poder competir con la aplicación de origen chino.

El problema con esto es que el formato de video corto poco a poco se va convirtiendo en el nuevo estándar. No está mal divertirse viendo TikTok de vez en cuando, pero sería absurdo pretender que pudiera reemplazar todos los otros formatos tradicionales de entretenimiento, principalmente series y películas.

Pues los chinos no piensan igual. Los "dramas ultracortos" se han convertido en una sensación enorme en ese país. Se trata de series de televisión publicadas en Douyin (la versión china de TikTok) que suelen contar con alrededor de cien episodios, de tres minutos cada uno. Take Me Home se está convirtiendo en el exponente más exitoso de este fenómeno.

Los dramas ultracortos se han convertido en una sensación cultural en China.

Un mercado gigante

En el 2023, la industria de los dramas ultracortos en China valía cinco mil doscientos millones de dólares. Habiendo crecido 270% en un año y con proyecciones de seguir aumentando su valor de mercado. Los primeros episodios suelen ser gratis, de manera que los usuarios se enganchen con la historia y estén dispuestos a pagar por ver el resto de la serie.

Debido a su formato, estas series suelen ser bastante crudas. Con historias directas y llenas de giros de trama, siempre terminando en un cliffhanger para motivarte a pagar para ver el próximo episodio. Para apelar a su clientela más leal, personas de mediana edad de bajos recursos, la mayoría de historias muestran a un protagonista fracasado y discriminado por la sociedad, quien termina triunfando contra todo pronóstico.

En una de las más virales, un oficinista decide acabar con su vida. Su jefe le gritó, su novia rompió con él por ser pobre y su madre murió en un accidente de tránsito. Por eso salta de un puente, solo para verse transportado a un mundo en donde todo es baratísimo debido a la hiperdeflación, lo que lo convierte en la persona más rica del mundo. El comienzo de la historia se desarrolla en menos de dos minutos.

Los actores se ven obligados a sobreactuar, ya que en los dramas ultracortos no hay tiempo para desarrollar personajes o explicar las motivaciones de lo que sucede de manera sutil. La calidad cinematográfica de estos contenidos es bastante pobre, por eso producirlos resulta barato y a la vez rentable.

Solo era cuestión de tiempo para que alguien intentara contar una historia a través del formato TikTok, su popularidad lo exigía. Sin embargo, es un esfuerzo cuya calidad se encuentra demasiado limitada desde el inicio. La profundidad narrativa, una de las principales señales de calidad cinematográfica, es una imposibilidad cuando tienes que escribir un episodio de tres minutos, dirigido a una audiencia que apenas le está prestando atención a tu contenido.

Take Me Home podría cambiarlo todo

Una hora después de haber sido estrenado, el primer episodio de Take Me Home ya tenía un millón de visualizaciones. En cuestión de un día había alcanzado los veinte millones. Se trata del primer drama ultracorto premium, ya que, a diferencia de sus competidores, cuenta con una producción de primer nivel, producto de su enorme presupuesto.

Mientras que la mayoría de dramas ultracortos son grabados en vertical para que sea más fácil verlos en un teléfono, Take Me Home fue grabado en horizontal. El elenco está lleno de actores famosos y la historia es un poco más compleja y realista, hasta donde permite un formato tan limitante. Cuenta con 24 episodios de cinco minutos cada uno y todos son gratis, ya que decidieron depender 100% de anuncios publicitarios.

Una captura del primer episodio del drama.

Take Me Home fue dirigido por la leyenda del cine de Hong Kong, Stephen Chow, conocido por sus grandes éxitos Shaolin Soccer y Kung Fu Hustle. Trata sobre una abogada de Taiwan quien descubre que su hermana está siendo estafada por un sujeto que pretende ser su novio. Creyendo haber identificado al estafador, decide viajar a la China continental para confrontarlo. La productora detrás del drama espera que, a través de producir contenido de mejor calidad, las series hechas con poco dinero y por eso con tramas e interpretaciones crudas ya no puedan competir con la alternativa profesional.

Parecía que el futuro de este tipo de dramas estaba asegurado, hasta que recientemente el gobierno chino comenzó a censurarlos en masa. Desde el 2022, decenas de miles de dramas ultracortos han sido prohibidos en China por no haber cumplido con los estándares. A mediados del 2023 los controles se ajustaron, para que todo drama que no haya sido aprobado por la agencia gubernamental sería automáticamente prohibido.

Por lo general, la censura está dirigida a ciertos tipos de comedia vulgar, pero no es fácil saber cuando estás incumpliendo las severas reglas de la burocracia. Estos procedimientos solo pueden sabotear los prospectos de la industria. De la misma manera que sucede con las películas y series tradicionales en China. Cuyo potencial artístico también se encuentra limitado por los estrictos mandamientos del gobierno.