Hace unos días Xiaomi actualizó su catálogo de tablets en España. Lo hizo con la Redmi Pad Pro, una nueva apuesta de gama media que llega con un diseño interesante, un rendimiento bastante decente, una pantalla de gran tamaño y un sistema de audio que va a ser la envidia de sus competidores.

La Redmi Pad Pro comparte espacio con la Xiaomi Pad 6s Pro y la Pad 6, dos opciones más avanzadas que no suponen una apuesta tan interesante en relación calidad-precio y que están enfocadas a un público más específico. De hecho, el objetivo de la protagonista de hoy es muy claro: ser la opción más atractiva para el usuario medio.

Y, si bien esta Redmi Pad Pro entra dentro de la categoría de 'tablets baratas', tras probarla durante unos días puedo decir que lo tiene todo para ser uno de esos productos superventas del catálogo de Xiaomi.

Ahora mismo es posible comprarla en su versión de 6 GB de RAM y 128 GB de almacenamiento por 299,99 euros. Y si necesitas un poco más, puedes optar por el modelo más avanzado de 8+256 GB por 349,99 euros. Solo un detalle antes de comenzar: la caja no trae cargador, por lo que tendrás que pasar por caja si quieres aprovechar sus 33 W de potencia.

La Redmi Pad Pro es bonita, grande y potente

Sacar la Redmi Pad Pro de su caja es una experiencia bastante satisfactoria. Nada más cogerla transmite ese tacto gélido que suelen tener los smartphones metálicos, y que se multiplica al tratarse de un aparato tan grande. Destaca y mucho su parte trasera, que está cubierta por una lámina de aluminio anodizado de una sola pieza. Sus marcos no son componentes independientes, sino que se curvan para formar los laterales y conseguir un cuerpo unibody.

El diseño me parece un buen motivo para comprarla, pues a pesar de ser una tablet por encima de las 10 pulgadas, no se siente demasiado pesada. Según la marca, tus manos soportarán 571 gramos cada vez que la sostengas. No es una cifra que destaque a la baja, pero es compensada por un grosor de 7,51 milímetros que sí agradecerás cuando la manipules.

Redmi Pad Pro

Dándole la vuelta encontramos su pantalla, que ofrece una diagonal de 12,1 pulgadas, resolución 2,5K, tecnología Dolby Vision y una tasa de refresco de 120 Hz. No solo es bastante amplia, además cuenta con unos biseles simétricos con el tamaño justo para no realizar toques fantasma sobre el panel.

A la hora de cuestionar su calidad es donde vas a notar que se trata de una tablet de 300 euros, y no por ser una mala pantalla, no me malinterpretes. Creo que Xiaomi ha hecho un buen trabajo con el panel, pero debes tener en cuenta que su tecnología es IPS, que su integración con los biseles no es sublime y que el brillo no va a ser suficiente si optas por utilizarla en el exterior un día radiante.

Ahora bien, el panel es colorido, tiene una resolución decente para su tamaño, la tactilidad es prácticamente perfecta y ofrece un desempeño bastante bueno en casi cualquier situación. Vas a poder jugar, ver películas, navegar o trabajar con una experiencia que, bajo mi punto de vista, está a la altura del precio a pagar.

Redmi Pad Pro

Y hablando de jugar, ¿qué tal se desenvuelve esta Redmi Pad Pro? Al césar lo que es del césar: la tablet incluye un Qualcomm Snapdragon 7s Gen 2, por lo que vas a poder moverte por la interfaz con soltura y jugar prácticamente a lo que quieras. En mis pruebas he instalado juegos como CoD Mobile o Genshin Impact y he podido disfrutarlos sin problema.

A pesar de no contar con un hardware de gama alta, es posible exigirle y obtener resultados muy buenos. Raras veces se ralentiza, el famoso lag apenas tiene presencia y puede interactuar con varias apps a la vez sin preocuparte por su rendimiento.

Una autonomía decente y un muy buen sonido

Por si no te has dado cuenta gracias a las imágenes, te cuento que la Redmi Pad Pro tiene 4 altavoces situados en sus laterales más cortos. Xiaomi ha querido dotar a esta tablet de un buen sistema de audio, por lo que ha integrado un hardware prestado de sus dispositivos más avanzados. El resultado, aunque no es sublime, sí es muy bueno.

El volumen máximo es alto, la calidad es muy buena y la dispersión del sonido —que no la distorsión— es amplia y contundente. Es un apartado diferenciador que se disfruta a la hora de jugar y también mientras ves contenido multimedia en YouTube o Netflix. Solo un apunte que no me ha encantado: la caja de resonancia interna de los altavoces podría mejorar y transmitir menos vibraciones al cuerpo de metal.

Xiaomi Redmi Pad Pro

Pasando a la autonomía, me ha sorprendido que Xiaomi haya conseguido integrar 10.000 mAh en un grosor de 7,51 mm y 571 gramos de peso, pero así es. Y, aunque todo depende del uso, veo poco probable que la batería acabe siendo un problema para la mayoría de usuarios. He jugado, he visto series y navegado durante varios días teniendo que pasar por el cargador solo un par de veces.

Configurando el modo oscuro, manteniendo un brillo medio y estableciendo la tasa refresco en el modo 'Predeterminado', vas a poder exprimir esta Redmi Pad Pro a diario sin tener que preocuparte demasiado por su autonomía. Además, aunque no incluye cargador, sí que disfruta de una modesta carga rápida de 33 W.

Dos accesorios para los más atrevidos

Cuando Xiaomi me envió esta tablet en el paquete venían dos cosas más: el Redmi Pad Pro Keyboard y el Redmi Smart Pen. El primero es un teclado que hace las veces de funda y el segundo un lápiz táctil que va más allá de un stylus estándar.

El Redmi Pad Pro Keyboard destaca por la comodidad de su teclado de membrana, la posibilidad de situar la tablet en modo stand y su amplia autonomía. Me parece un buen complemento para estudiantes o usuarios que vayan a trabajar con la tablet, aunque el conjunto se vuelve un poco pesado para ir de aquí para allá. Además, solo ofrece una posición, por lo que no es posible regular el ángulo del dispositivo a tu gusto como sí ofrece, por ejemplo, el teclado de Apple. Eso sí, su precio es infinitamente más bajo: se puede comprar por 99 euros.

Xiaomi

En cuanto al Redmi Smart Pen, no puedo contarte que haya logrado dibujar grandes cosas con él, aunque no por culpa del lápiz, sino de mis conocimientos. Xiaomi ha integrado diferentes puntos de presión que modifican el haz de la herramienta que estás utilizando, ha incluido dos botones para cambiar fácilmente entre lápices o colores y ha diseñado una interesante aplicación para sacarle provecho. Ahora bien, para los mortales que no sabemos dibujar y no nos dedicamos al diseño, es un accesorio demasiado avanzado para las pocas veces que es de utilidad. Además, su precio no es lo suficientemente bajo como para comprarlo 'por si las moscas': cuesta 79,99 euros.

Xiaomi

Si te interesa alguno de estos dos accesorios, y por si no lo he comentado todavía, no vienen incluidos con la compra de la Redmi Pad Pro y ambos disfrutan de una conexión USB C para ser recargados con un mismo cable.

¿Merece la pena la Redmi Pad Pro?

Lo cierto es que . Supone una buena entrada en la gama media de tablets Android, su diseño es digno de opciones más caras, va más allá de las clásicas 10 pulgadas y ofrece un precio muy competitivo de 299,99 euros.

Sumando su buen rendimiento y la decente calidad de visualización, creo que debe tener un hueco en tu lista si lo que estás buscando es una tablet económica para trabajar, estudiar o disfrutar de contenido multimedia dignamente.

Si, por el contrario, lo que buscas es una opción para exprimir el apartado gráfico, editar vídeo o realizar tareas de productividad, puede que el iPad de 10ª generación o la Xiaomi Pad 6S Pro sean opciones más interesantes. Eso sí, no tan económicas.

De hecho, si no tienes demasiada prisa, es recomendable esperar a que tiendas como Amazon o AliExpress lancen alguna oferta y la consoliden como una opción todavía más atractiva.