Windows 10 sigue siendo la versión más usada del sistema operativo de Microsoft a nivel mundial, y con gran diferencia. Sin embargo, los de Redmond quieren que te cambies a Windows 11 y te perseguirán hasta el cansancio para lograrlo.
Según reporta Windows Latest, muchos usuarios de Windows 10 se toparon con una campaña bastante invasiva que los alentaba a pasarse a Windows 11. Y cuando decimos invasiva, lo decimos en el sentido más explícito de la palabra. La "invitación" no solo constaba de 4 paneles a pantalla completa, sino que además no ofrecía un modo sencillo de cerrarlos y descartarlos.
El mensaje en cuestión comenzó a aparecer en ordenadores que instalaron la actualización opcional de Windows 10 que se lanzó en enero. Microsoft se ha ganado múltiples críticas por esta estrategia, puesto que no es la primera vez que hace algo así para empujar al público a instalar Windows 11.
Microsoft hace todo a su alcance para empujar las actualizaciones a Windows 11
Considerando que el fin del soporte para Windows 10 llegará el próximo año, es lógico que la compañía trate de brindar una opción sencilla para actualizar los PC compatibles a Windows 11. Las quejas contra los de Redmond pasan por el método utilizado en este tipo de invitaciones a pantalla completa, donde muchos terminan sintiéndose forzados a actualizarse a la versión más reciente del SO.
En los casos reportados en los últimos días, Microsoft incluyó la opción de seguir en Windows 10 en la primera pantalla del anuncio. Sin embargo, el botón era pequeño y estaba en la parte inferior del panel, lejos de las opciones para continuar con el upgrade. Para darle una pizca extra de confusión al asunto, la firma incluyó dos botones para descargar la actualización. Uno para hacerlo de inmediato y otro para programarlo para más tarde.
Quienes no descartaran el pase a Windows 11 en la pantalla inicial, debían llegar hasta la tercera para rechazarla. Y aun así, tenían que pasar por una ventana más para confirmar que realmente preferían permanecer en Windows 10. Una pérdida de tiempo para el público, que termina enojándose con Microsoft por su histórica inclinación a presionar a los usuarios para que adopten sus productos.
El fin del soporte para Windows 10 llegará en octubre de 2025; es decir, en menos de dos años. Sin embargo, continúa siendo el sistema operativo de Microsoft más usado a nivel mundial. En enero de 2024, el software todavía acaparaba el 66,43 % de la cuota de mercado global. Mientras que Windows 11 apenas llegaba al 27,82 %.
Windows 10 sigue siendo el rey
Considerando que Windows 11 se lanzó en el último trimestre de 2021, su ritmo de adopción todavía es muy lento. Y si bien su marketshare ha crecido casi un 10 % desde enero de 2023, es evidente que los números todavía no terminan de convencer a Microsoft. Máxime, cuando existen grandes rumores de que Windows 12 llegará a mediados de este año.
Windows 11 ha evolucionado drásticamente desde su lanzamiento, pero sigue sin ser una opción atractiva para muchos usuarios. Los cambios de diseño, los problemas de estabilidad y las ridículas exigencias de hardware estipuladas antes de su debut, han sido suficientes para que la gran mayoría opte por quedarse en Windows 10.
Ni siquiera la introducción de Copilot ha sido motivo suficiente para incrementar la cuota de mercado de Windows 11. Aunque aquí tal vez Microsoft haya cometido un error no forzado al también llevar su asistente virtual a Windows 10. Es evidente que aquí los de Redmond priorizaron llevar la IA al mayor número de personas posible, antes que ofrecer una experiencia distintiva en Windows 11 de la mano de esta tecnología.
Si algo está claro es que Windows 10 no desaparecerá del mercado de la noche a la mañana. Y los de Redmond tendrán que hacer algo más que forzar invitaciones de actualización a pantalla completa para lograr que Windows 11 —o su sucesor— obtengan una adopción masiva entre los usuarios.