Insomniac Games se ha convertido en una especie de salvavidas para Sony. La tremenda eficiencia del estudio con sede en Burbank, California, permitió que la PlayStation 5 iniciara su camino con dos títulos de gran calidad: Marvel's Spider-Man: Miles Morales y Ratchet & Clark: Una dimensión aparte. Muchos pensamos que pasaría demasiado tiempo para ver su siguiente juego, pero no. Apenas dos años después de su último lanzamiento, Insomniac fue capaz de entregarnos Marvel's Spider-Man 2.
Desde luego, no es cualquier título. Spider-Man 2 es, por mucho, el más esperado de la plataforma PlayStation durante el presente año. Y es que su predecesor resultó ser una propuesta sobresaliente. Por algunos, incluyéndome, es considerado como el mejor videojuego de superhéroes de la historia. Por esta razón, la expectativa en torno a Spider-Man 2 se encuentra por las nubes.
Imsomniac Games, no obstante, debía superar un reto mayúsculo en esta secuela; uno que nunca antes había enfrentado. Cuando hablamos de sagas de mundo abierto, es habitual que cada nueva entrega ofrezca un escenario completamente diferente. Es la primera novedad con la que pretendes atraer la atención de los jugadores. El problema es que Spider-Man, como franquicia, no se presta del todo para tal cambio.
El superhéroe arácnido, a través de cómics, películas, series y videojuegos, casi siempre ha estado ligado a Nueva York. El cambio de ambientación, por lo tanto, no era una opción en Spider-Man 2. Cabe señalar, además, que esta es la tercera vez que visitamos esta ciudad dentro del universo planteado por Insomniac, ya que Miles Morales, que no deja de ser una expansión del primer juego, también se ambientó allí.
¿Por qué este tema es tan importante? Porque el estudio, ante la limitante de la localización, centró sus esfuerzos en mejorar la jugabilidad. Lo anterior no significa, sin embargo, que no hay novedades en el mundo abierto, porque las hay en cuanto a expansión del terreno. Lo que sucede es que pasan a segundo plano si lo comparamos con todo lo demás.
Gracias a la amplia experiencia de Insominac en el terreno del gameplay, puedo decirte lo siguiente. Si tenías alguna sospecha de que Spider-Man 2 fuera más de lo mismo, deja de preocuparte. Es una experiencia fresca, divertida y, por si fuera poco, superior a su predecesor en todo sentido. Vamos en orden, porque hay mucho por comentar.
Historia arácnica por partida doble
Primeramente, tenemos que hablar de la historia de Spider-Man 2, que sigue siendo un elemento clave. No voy a soltar ningún spoiler porque no tengo intención alguna de arruinar tu experiencia, pero sí hablaré de algunos detalles que se conocen oficialmente desde hace meses. El más significativo: la narrativa, en esta ocasión, tiene a dos protagonistas: Peter Parker y Miles Morales.
Dichos personajes protagonizaron, de manera individual, los juegos que preceden a Spider-Man 2, así que no necesitan presentación. La campaña no pierde el tiempo con introducciones o explicaciones innecesarias. Dan por hecho que jugaste los títulos anteriores y a partir de ellos comienzan a desarrollar todo lo demás.
El hecho de que tengas dos personajes principales, ambos con la misma relevancia de principio fin, lo cambia todo en la historia. Si bien es cierto que una buena cantidad de misiones los involucra a ambos, también tienen sus propias actividades. Y lo que es más importante: cada uno tiene una vida que se desarrolla de forma independiente.
Básicamente, entonces, estamos disfrutando dos narrativas en Spider-Man 2. Debido a la disparidad de edad entre Peter Parker y Miles Morales, sus vivencias son distintas entre sí.
Ahora bien, pese a las dificultes que tuvo Miles en su propio juego, Peter Parker lo sigue viendo como ese hermano menor al que debe transmitirle sus conocimientos y, ante todo, proteger. Aún así, ambos son conscientes de que los enemigos que deambulan en Nueva York representan un peligro latente. Tanto para ellos, como para sus seres queridos.
Hablando del bando contrario, Spider-Man 2 tiene un completo roster de antagonistas. Ninguno, eso sí, tan clave y poderoso como Venom. Por algo aparece en la portada del juego y es parte fundamental de la campaña promocional. Y es que la intervención del simbionte es crucial a lo largo de la historia e incluso en el gameplay, en el cual profundizaré más adelante.
En los cómics y películas del arácnido se nos ha dejado claro que Venom no es un villano cualquiera. Más allá de funcionar como una entidad independiente, igualmente es capaz de tomar el control de seres y transformarlos por completo. En Spider-Man 2 no iba a ser la excepción. El arco argumental que gira en torno a Venom es el más interesante de todos.
Kraven el Cazador, Lagarto, Grizzly y Mister Negative —tal vez alguna sorpresa adicional aguarda— complementan la lista de enemigos de Spider-Man 2. Y de la misma forma que los superhéroes tienen su propia vida, estos villanos están en Nueva York con objetivos muy particulares, algunos más complejos y siniestros que otros. Debo destacar que Insomniac profundiza en ellos, en menor o mayor medida, para que no quede duda de cuál es su propósito y el por qué del mismo.
En términos generales, Spider-Man 2 tiene una historia sólida y bastante entretenida. Dan su debido lugar e importancia a todos los personajes que aparecen en pantalla, situación que nunca es fácil de gestionar. Así pues, vuelve a quedar en evidencia que Insomniac Games sigue mejorando en el apartado narrativo. Todavía no está al nivel de Naughty Dog o Santa Monica, pero van bien encaminados hacia ese pedestal dentro de Playstation.
Spider-Man 2 brilla por su jugabilidad
Es el turno de hablar de la joya de la corona de Spider-Man 2, su gameplay. Podrías suponer que, en este rubro, tampoco había algo nuevo por ofrecer. Sin embargo, en Insomniac volvieron a dar con la fórmula para brindarnos una de las experiencias jugables que más se disfrutan hoy en día. Si el primer título ya era sobresaliente en este sentido, lo de Spider-Man 2 alcanza un nuevo nivel.
Previamente te mencioné que la historia estaba protagonizada por Peter Parker y Miles Morales. Pues también han aprovechado esa propuesta narrativa en términos de jugabilidad. Uno de los nuevos añadidos de Spider-Man 2 es la posibilidad de intercambiar personajes casi en cualquier momento, y al alcance de un botón. Es muy parecido a lo que vimos en la campaña de Grand Theft Auto 5, y no dudo que se hayan inspirado en la mecánica ideada por Rockstar Games.
El cambio entre uno y otro personaje es instantáneo. No existen las pantallas de carga y eso contribuye a lograr una aventura fluida. Lo anterior, desde luego, ha sido posible gracias al sistema de almacenamiento SSD de la PS5. No importa si el colega arácnido se encuentra del otro lado de la ciudad; el traslado en rapidísimo.
En función del superhéroe elegido, el mapa mostrará sus propias actividades principales y secundarias. Además, claro, cada uno tiene su propio sistema de progresión. Regresa el árbol de habilidades, el cual te dará acceso a movimientos cada vez más poderosos y complejos.
Una de mis mayores preocupaciones sobre la aventura dual era cómo crearían un balance, pues está claro que más de algún jugador priorizará, a veces involuntariamente, a un personaje específico. Si no estás repartiendo el tiempo equitativamente, haciéndolos progresar en un ritmo similar, el juego te conduce a hacerlo. Así, evitan que exista una desproporción cuando es momento de involucrarlos a ambos en una misma actividad.
El sistema de combate de Spider-Man 2 es una gozada. Especialmente, porque han introducido nuevos movimientos, habilidades y gadgets que harán más divertidas las contiendas. Evidentemente, habrá muchos momentos en los que Peter y Miles unen sus fuerzas, y es posible cambiar la selección para aprovechar la capacidad de lucha de cada uno.
De hecho, algo que me agradó bastante, y que francamente no me esperaba, es que también hay un sistema de progresión compartido. Es decir, una serie de parámetros a desbloquear para momentos en que los dos comparten pantalla.
Por supuesto, el combate no sería excelente si los enemigos no estuvieran a la altura. El repertorio de antagonistas y jefes es amplio, con capacidades de ataque y defensa tan diversas que cada enfrentamiento te obligará no solo a desplegar las habilidades y artilugios que ya tienes a tu alcance, sino también a usar elementos del entorno y estudiar cuáles son las debilidades del contrario para elegir correctamente tu próximo movimiento.
Incluso habrá ocasiones en que el otro Spider-Man cuenta con una habilidad más favorable para ese momento de la batalla. En consecuencia, lo mejor será cambiar de personaje. Ojo con el "traje" simbionte, porque te convierte en una bestia imparable. Había muchas posibilidades jugables en torno a la incursión de Venom en Spider-Man 2, y considero que el estudio las supo aprovechar muy bien.
La Nueva York de Spider-Man 2 es inmensa
El mundo abierto de Spider-Man 2, si bien hereda la base de los juegos que le preceden, agrega tres nuevas zonas de considerable tamaño. En primer lugar, ahora tenemos dos de los distritos más populares de la ciudad estadounidense: Queens y Brooklyn. Debido a que en estos lugares predominan las residencias en lugar de los grandes rascacielos, la movilidad del personaje cambia.
En ambos distritos, la telaraña podrá servirnos para impulsarnos hacia los aires, pero al momento de descender, entra en juego un nuevo complemento para el traje: las alas de telaraña. Básicamente, con esas podremos planear como si fuéramos un ave. La gran velocidad que es posible alcanzar te permitirá recorrer grandes distancias en cortos periodos de tiempo.
Recalco las palabras "grandes distancias" porque, en Spider-Man 2, el mapa aumentó sus dimensiones de manera significativa. A Queens y Brooklyn hay que sumar Coney Island, una isla inmensa ubicada al lado de Manhattan, y a la cual puedes acceder por medio de múltiples puentes. En total, tenemos un escenario el doble de grande respecto al que ya conocíamos.
Pero Insominiac no solo aumentó la extensión. Es evidente que la Nueva York de Spider-Man 2 está más detallada visualmente. La calidad de las texturas, de los modelos de objetos y la iluminación, dieron un salto notable. Asimismo, el mundo abierto se siente más vivo que nunca. Siempre hay cosas ocurriendo por doquier. A veces un simple llamado de emergencia a la policía puede convertirse en una misión secundaria compleja.
Se nota, igualmente, un trabajo más refinado en las animaciones. Y créeme, pese a ser muchísimas, todas exponen una calidad excepcional. Sin importar si solo estás recorriendo Nueva York, o involucrado en un desafiante combate contra un temible villano, la sensaciones que transmite el movimiento de los personajes son muy positivas. Me atrevería a decir que ambos se sienten más ágiles que en las entregas previas.
Eso sí, te recomiendo ampliamente jugar en modo rendimiento, que ofrece resolución dinámica a 60 FPS. Es un juego de acción donde predomina el movimiento y, en mi opinión, ni siquiera deberías contemplar jugar en modo calidad. Vale toda la pena sacrificar algunos detalles visuales en favor de la tasa de fotogramas.
No podía culminar este análisis sin hacer mención de lo bien logrado que está el apartado audio. La calidad de los efectos sonoros o la sorprendente banda sonora, muy afín a la epicidad de tu aventura, son dignas de reconocimiento. Spider-Man 2 vuelve a brillar por lo acertados que son sus diálogos. Incluso en momentos complicados, los arácnidos se atreven a lanzar uno que otro comentario gracioso que te sacará una sonrisa.
Spider-Man 2, en términos generales, me ha dejado bastante satisfecho. A pesar de no poder contener mis expectativas por el estudio del que proviene, las han superado. Pero lo que es más importante: en Insomniac se han superado a sí mismos, otra vez... Me sigue pareciendo sorprendente lo que son capaces de lograr en cortos periodos de tiempo y me genera mucho ilusión lo que harán ahora con Wolverine.
Sin lugar a dudas, Spider-Man 2 el mejor videojuego de superhéroes que se puede disfrutar hoy en día. Si eres un poseedor de la PS5, pero sobre todo si eres fan del arácnido, Spider-Man 2 es una aventura imprescindible.