Con el anteproyecto de la Ley de Fomento de la Financiación Empresarial aprobado a lo largo de día de hoy en el Consejo de Ministros para su tramitación en el parlamento, el ejecutivo ha limitado en buena parte la formas de financiación alternativas de proyectos empresariales tempranos. El crowdfunding, una de las formas de financiación masiva a través de pequeñas micro-participaciones que más fuerza ha adquirido en los últimos años gracias a internet, ha quedado tocada de muerte y limitadas enormemente sus posibilidades. No obstante, existen otras formas para financiar nuestros proyectos sin necesidad de recurrir al crowdfunding o a las entidades bancarias tradicionales.

Debido a que cada proyecto, empresa temprana o startup requiere de una condiciones de financiación distintas, hay que delimitar, en función del proyecto dichas necesidades y tener muy claros los aspectos claves que lleva aparejada toda inversión o financiación, sobre todo en lo que se refiere al coste financiero y al riesgo que supone para el emprendedor o empresa financiarse.

3F`s

Una de las formas de financión más popular son las 3Fs o FFF, que no es más que el acrónimo de family, friends and fools. Esta forma de financiación se basa en sea el emprendedor el que recurra a sus conocidos, amigos y familiares más cercanos para que financien su proyecto, y generalmente se utiliza en las fases más tempranas del mismo.

Las 3F`s son la forma más fácil y barata de acceder a capital ajeno para nuestra startupComo toda forma de financiación tiene sus ventajas e inconvenientes. Por un lado, es más fácil y más rápido obtener dinero directo de nuestros familiares y amigos si les convencemos que tenemos un proyecto viable. Además también permite más flexibilidad al emprendedor desde el momento en el que los acreedores (aquellos que han puesto el dinero) no suelen imponer intereses derivados de la deuda que el emprendedor ha contraído con ellos, la deuda no suele llevar aparejada una contrapartida en forma de aval, garantía o compensación y los plazos para la devolución del capital suelen ser más largos.

¿Contrapartidas? Derivadas del propio modelo de financiación. Al recurrir a familiares y amigos para conseguir financiación pueden surgir discrepancias cuando el proyecto no tiene viabilidad que acaban convirtiéndose en problemas personales y familiares, por lo que es muy importante tener en cuenta a quién y en que condiciones se le pide capital.

Préstamos Subvencionados

Son generalmente aquellas que proveen las líneas de crédito gubernamentales como el ICO en España, sean a fondo perdido o no. El objetivo principal de este tipo de financiación es ayudar a crear la estructura básica de una empresa a un interés muy reducido a través de inyecciones de liquidez. A pesar de que muchos de estos prestamos subvencionados están dirigidos a la constitución de las startups, lo más aconsejable es solicitarlos cuando el proyecto ya esté en marcha para que podamos demostrar a la entidad gubernamental o privada de su competencia la viabilidad del proyecto.

Generalmente, los créditos ICO ofrecen plazos hasta 20 años con importe máximo a financiar de hasta diez millones de Euros y requieren menos contraprestaciones que acudir a las entidades financieras tradicionales, a pesar de que muchas de ellas participan en la concesión de estos préstamos, por lo que es una alternativa a tener en cuenta.

Business Angels y Capital riesgo

wayraCall

Los Bussines Angels y las entidades de capital riesgo son otra de la formas de financiación más populares pero llevan aparejada un característica implícita en si misma: la escalabilidad. Generalmente al recurrir a estas formas de financiación se requiere que el proyecto ya esté más o menos empezado y que se demuestre tanto la viabilidad (aunque sea esperada) del mismo, como la posible escalabilidad del negocio en el futuro.

Los business angel y el capital riesgo suele ser la formula más popular para las tech startupsA pesar de que son formas de financiación distintas, comparte un mismo propósito: cubren las necesidades de financiación y capital del proyecto a cambio de una participación en el mismo, y a su vez ayudan y asesoran al emprendedor o emprendedores a cumplir los objetivos (al menos en la figura del business angel) para posteriormente vender su participación y obtener de ello su rentabilidad. La diferencia entre ambas figuras es que el business angel invierte sus propios fondos y las entidades de capital riesgo hacen lo propio con mayores cifras de financiación a través de carteras de inversión, sean propias o de terceros, por lo que tanto las contrapartidas como la cantidad final financiada suelen ser mayores que en el primer caso.

Este modelo de financiación mediante business angel cubre el lapso temporal entre las 3Fs y la entrada del capital riesgo, por lo que es necesario que el proyecto haya abandonado su fase más temprana y haya mostrado signos de viabilidad y escalabilidad.

Préstamos participativos

Este modelo se caracteriza por la participación de la entidad bancaria que lo concede en los beneficios del proyecto junto con una contrapartida de interés variable. Es una fórmula de financiación media entre el capital riesgo y el préstamo tradicional a largo plazo.

Tiene un plazo de vencimiento a largo plazo unido a un periodo de carencia también a largo plazo, lo que permite mayor liquidez en las fases tempranas del proyecto a pesar de que la exigibilidad de este tipo de financiación es la misma que para un préstamo tradicional. Además hay que tener en cuenta que en caso de que se quiera amortizar antes del vencimiento es necesario por parte del emprendedor compensarlo con un ampliación del capital con el mismo montante que los fondos propios para evitar perjudicar al resto de acreedores, por lo que sus contraprestaciones son algo más complejas que las otras figuras pero al fin y al cabo de trata de método alternativo de financiación a tener en cuenta.

Participaciones laborales

Esta forma de financiación es bastante popular en muchas startups que están empezando y consiste en ceder participaciones o acciones de la compañía recién creada a cambio de trabajo, eliminando en parte las necesidades de financiación externas, pero obligando de delimitar la estrategia y la sostenibilidad el proyecto en el futuro.

Mercado Alternativo Bursátil

Es quizás la forma de financiación menos conocida de todas, y se trata de un mercado de valores que cuenta con una regulación a medida dedicado a compañías con muy poca capitalización que buscan expandirse o tienen necesidades de financiación. El MAB (Mercado Alternativo Bursátil) es un sistema bursátil promovido por Banco de España y regulado por CNMV para valores de la Unión Europea y también de Latinoamérica.

A diferencia del mercado continuo (el IBEX, por ejemplo) está destinado a especialmente para las SICAV, entidades de capital riesgo y PYMES en expansión y permite el acceso a nueva financiación, a una mayor notoriedad y presencia de la compañía en los mercados en los que opera y liquidez, aunque está limitado a aquellas PYMES constituidas como sociedad anónimas y con un proyecto ya viable y en marcha, por lo que a pesar de ser una forma de obtener financiación y liquidez, es una formula más limitada si el proyecto está en una fase temprana.